Instrucciones diarias

Un día le pedí a Dios instrucciones para vivir en esta tierra…
Dios acercó su voz a mi oído y me dijo:
Sé como el sol, levántate temprano y no te acuestes tarde.
Sé como la luna, brilla en la oscuridad, pero sométete a la luz mayor.
Sé como los pájaros, come, canta, bebe y vuela
Sé como las flores,
 Enamoradas del sol, pero fieles a sus raíces...
Sé como el buen perro obediente, pero nada más a su Señor.
Sé como la fruta, Bella por fuera, saludable por dentro.
Sé como el día, Que llega y se retira sin alardes.
Sé como el oasis, Da tu agua al sediento.
Sé como la luciérnaga, Aunque pequeña emite su propia luz.
Sé como el agua, Buena y transparente.
Sé como el río, Siempre hacia adelante.
Y por sobre todas las cosas, Sé como el cielo: La morada de Dios.
Enséñame a hacer tu voluntad,
porque tu eres mi Dios, tu espíritu bueno me guíe a tierra de rectitud.
Salmo 143:10
Señor, no permitas que me quede donde estoy.
Ayúdame a llegar a donde tú esperas que llegue.
Que instrucción aprendiste hoy?
Ten una linda semana
Y que DIOS te guarde siempre

La Maestra Riveros

Su nombre era Sra. Riveros mientras estuvo al frente de su clase de 5º grado, el primer día de clase lo iniciaba diciendo a los niños una mentira. Como la mayor parte de los profesores, ella miraba a sus alumnos les decía que a todos los quería por igual. Pero eso no era posible, porque ahí en la primera fila, desparramado sobre su asiento, estaba un niño llamado: Facundo Moreno.