Todos somos sembradores


El sembrador salió a sembrar su semilla…”- Lucas 8.5 -
Para tener cosecha en el futuro uno debe sembrar en el presente sabiendo que esto es directamente proporcional y que para cosechar primero hay que sembrar.

“El sembrador…”: necesitamos comprender que todos somos sembradores, aun cuando no nos dediquemos a sembrar.

También necesitamos entender que la ley de la siembra y la cosecha se cumple siempre, y este es un dato muy importante a tener en cuenta en todas las áreas de nuestra vida.
No dejes de identificarte con lo que sos, esto es, un sembrador, y actuá en consecuencia sembrando aquello que quieras cosechar.

“salió…”: esto significa que se puso en marcha, es decir que actuó y alejó de su vida toda pasividad.

No te olvides de salir dejando tu zona de comodidad y actuando verdaderamente para obtener aquello que deseás lograr.

Acordate de que nada sucederá, aun con una palabra que hayas recibido, si no te activás para actuar en consecuencia frente a ella.

“a sembrar…”: por más que seas sembrador y que salgas, podes hacerlo a pasear, no a sembrar.

No malgastes tu vida, dedícate a sembrar en el tiempo de la siembra para tener que cosechar en el tiempo de la cosecha.

Recordá también que el que siembra generosamente también cosechará generosamente, sé generoso a la hora de actuar.

“su semilla…”: esto significa lo que ya tenés en tu mano, empezando también primeramente vos antes de recibir ayuda de los demás.

No te olvides que todo lo que tenemos se puede convertir en semilla para poder sembrarlo y bendecir a los demás.

No dejes tampoco de obtener semilla nueva para que tu mano siempre tenga algo para ser sembrado en vos y en otros.

Oro sobre tu vida para que puedas asumirte como sembrador y que salgas a sembrar la semilla que hay en vos y que, con la bendición de Dios, tengas siempre una cosecha abundante.

    
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