¿Qué hay detrás de la agenda de género?

por José Luis Lozano 
Publicado el 02 de abril de 2018
“Dios ha puesto el petróleo en una zona del mundo donde ni lo necesitan ni saben utilizarlo. Nosotros sabemos usarlo y lo necesitamos”. (Henry Kissinger, 1973). 

¿Intereses económicos? 


Nos quieren ignorantes, dóciles, manejables, obedientes, sumisos y pocos; para poder explotarnos. ¿Quiénes? Los adoradores de Mammón, el dios de la avaricia y la codicia ante el que se arrodillan los esclavos del dinero. Mammón, dios de las riquezas, del beneficio o la utilidad en el panteón de los fenicios según eruditos, es quien reina verdaderamente en nuestro mundo.
En el año 1974, durante los últimos días del gobierno del Presidente de Estados Unidos; Nixon, se creó un documento secreto[1], bajo la dirección del Secretario de Estado Henry Kissinger, señalando al crecimiento de la población en los países del tercer mundo como “un asunto de máxima importancia y preocupación“. 

En 1989 estos documentos fueron desclasificados. Esto permitió descubrir como el Informe Kissinger recomendaba al Ejecutivo del gobierno de Richard Nixon declarar de máxima prioridad el control de natalidad en 13 países. Brasil aparecía en primer lugar; los otros países eran India, Bangladesh, Paquistaní, Nigeria, México, Indonesia, Filipinas, Tailandia, Egipto, Turquía, Etiopía y Colombia. Se alegaba que la “explosión” demográfica era una “amenaza” para la seguridad de de los EE.UU. Entre otras cosas, recomendaba a las agencias del gobierno de EE.UU. no usar el término “control de la natalidad” para no asustar a los políticos, sino expresiones como “planificación familiar” o “paternidad responsable”. El objetivo era garantizar el acceso de los EE.UU. a las materias primas de esos países, minimizando el consumo interno en ellos. 

En los capítulos 3 y 4 del Memorandum, se mencionan a los minerales y combustibles, indicando los niveles de materias primas que EE.UU. necesita para mantener sus niveles de desarrollo y consumo. Este acceso a las materias primas se vería amenazado por el crecimiento poblacional del Tercer Mundo, debido a su mayor consumo y a un supuesto riesgo de alteraciones del orden público en tales países. 

“… este hecho le da a los EE.UU. un creciente interés en la estabilidad social, política y económica de los países productores. Donde sea que una disminución de las presiones poblacionales por medio de menores tasas de natalidad puede incrementar las perspectivas de tal estabilidad, la política poblacional se convierte en relevante para el suministro de recursos y para los intereses económicos de los EE.UU.”. NSSM. 200 
“El rápido crecimiento poblacional afecta negativamente todos los aspectos del progreso social y económico de los países en desarrollo… esto lleva a preguntar cuánto más fácil serían los desembolsos para combatir la natalidad, que los destinados a incrementar la producción por medio de inversiones directas en irrigación, o proyectos para generar energía construir fábricas,…” Memorandum 200. Informe Kissinger 

¡Confunde y reinarás! 
El informe recomienda ocultar las verdaderas intenciones, evitando hablar de “control de la natalidad para no asustar a los políticos”. 
¿Cuál es la propuesta entonces?. Promover las reducciones en la fertilidad, aumentar los métodos anticonceptivos, facilitar la sanción de leyes abortistas y modificar los roles de género tradicionales. Objetivo final: “controlar la población mundial para un mejor desarrollo económico”. 
En el informe también se enfatiza la urgente necesidad de condicionar las ayudas económicas externas, préstamos y créditos internacionales a los países que no implementen éstas leyes del control de la población y el liderazgo de los Estados Unidos con todas sus organizaciones aliadas, sería esencial para poder llevar a cabo este macabro plan de acción mundial. 
El “informe Kissinger” podría definirse como: “Un extenso análisis de la situación demográfica mundial y las soluciones para lograr la estabilidad de los intereses de Estados Unidos relacionados con los recursos naturales que alimentan las industrias norteamericanas.” 

Verdaderas prioridades 
El presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta, en una rueda de prensa aseguró a Obama, cuando el presidente de los Estados Unidos visito Kenia: 

“..los derechos de los homosexuales, es un tema que no tiene relevancia para los habitantes de este país y no está en el programa de nuestras discusiones. Como país, como continente, estamos enfrentados a problemas mucho más serios, que queremos abordar con Estados Unidos y con el conjunto de nuestros socios…la pobreza, un mejor sistema de sanidad para la población, una mejor educación, una mejor red de carreteras, una mejor seguridad, he aquí nuestras verdaderas prioridades".[2]

¡Piedra libre! 
Ya no es novedad saber que el dios Mammón siempre está detrás de todo. Hoy observamos que existe una gran participación protagónica no solo de Estados Unidos, sino de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), por medio de políticas canalizadas por UNESCO, UNICEF, el Banco Mundial, el Fondo de Población y la Organización Mundial de la Salud, entre otras organizaciones, para promover e imponer la agenda de género (ver: Europa pretende imponer ‘género’ a Mercosur)[3]. 
Estas políticas están ya documentadas e impulsadas y solo basta con ingresar a las páginas web de esas organizaciones y observar, leer y reflexionar al respecto. 
La agenda de genero pues, tiene un carácter imperialista y neo-colonialista. 
¿Qué hacen los grupos de izquierda y de defensa de los derechos humanos, alimentando políticas imperialistas y neo-colonialistas? 
¡Lo paradógico es observar que quienes mas promueven ésta ideología dicen defender la libertad y la vida! 

Mi pueblo fue talado, porque le faltó sabiduría (Oseas 4:6) 
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[1] The National Security Study Memorandum 200 (“Memorándum 200 sobre la Seguridad Nacional”) o NSSM-200, que también se conoce con el nombre de The Kissinger Report (“El Informe Kissinger”). https://es.wikipedia.org/wiki/NSSM_200

[2] Derechos de los gays,"tema irrelevante"para Kenia durante visita de Obama